“Mi experiencia fue muy positiva, a pesar de que al ser la primera edición éramos pocos alumnos. Esto permitió recibir una formación muy personalizada. El máster te da una visión global de las causas de los problemas que generan la desigualdad en el mundo, no siendo solo un problema económico, sino político y social. Esta inequidad en la distribución de los recursos económicos, políticos y sociales, son el principal problema que genera la pobreza en el mundo, y el grado de salud de la población está directamente relacionado con estas inequidades.”
Así describe Begoña su experiencia y sus conocimientos adquiridos en el Máster de Cooperación al Desarrollo.
Actualmente es enfermera, trabaja en el sistema público de salud. Forma parte voluntariamente de la Junta Directiva de Medicusmundi Mediterrania, con delegación en Alicante, y también pertenece al consejo ejecutivo de la federación de asociaciones Medicusmundi de España (FAMME).
“Es cierto que para estas funciones no se me ha exigido en ningún momento una determinada formación, pero tenerla me ha facilitado la capacitación para entender muchos de los temas a tratar a este nivel dentro de la organización.”
Una de las cosas que valora Begoña de nuestro máster es que le ha otorgado un pensamiento crítico: “Estudié el Máster pensando que no iba a tener una gran repercusión en mi vida laboral, y aunque es cierto que directamente no ha influido, sí lo ha hecho de manera indirecta, siendo una profesional con pensamiento crítico, defensora de la salud como un derecho, tanto aquí como en los países con menos recursos, con capacitación para entender los movimientos migratorios, con conocimientos de cómo funciona la sanidad en otros países, con grandes ideas en materia de Salud Pública, incluso de la gestión sanitaria.”
Begoña decidió estudiar el Máster en Cooperación al Desarrollo para completar su formación en cooperación, destaca que “Al ser un máster interuniversitario, pude convalidar parte de las asignaturas cursadas con anterioridad y conseguir la titulación de Máster Oficial. La especialidad en Salud, además me brindaba poder ampliar esta formación en mi área de trabajo y conocimiento, ya que soy enfermera.”
Si hablamos de la experiencia de Begoña en el máster, tenemos que empezar con sus prácticas en Mozambique. “Realicé mis prácticas en la oficina de Maputo, Mozambique, de Medicusmundi, ONG a la que pertenecía y sigo formando parte de su junta directiva como voluntaria. A través de ellos, gestioné un periodo de acompañamiento en las tareas diarias que dicha oficina ejerce, gestionando todos los proyectos que la ONG tiene en el país. También tuve la oportunidad de acompañar a la coordinadora del país a una visita a terreno para el cierre de un proyecto, en el norte de Mozambique.”
Para concluir, Begoña, nos deja esta reflexión sobre como los estudios en el campo de la cooperación deben evolucionar con la realidad que nos acompaña: “La cooperación internacional está muy ligada a las políticas mundiales. Considero que el ámbito universitario es el marco ideal, junto con la experiencia de las ONGs, donde ir haciendo esa evolución, desde una cooperación basada en el asistencialismo hacia una cooperación que va hacia la asesoría, empoderamiento y gobernanza de los pueblos.
Vivimos en una sociedad con un fuerte legado de la tradición católica, basado en el concepto caridad, centrando nuestra solidaridad en acciones principalmente asistencialistas, con escaso compromiso de cambio. Como sociedad hemos de avanzar y abandonar este antiguo concepto, que en los inicios de la cooperación podía estar justificado, hacia un concepto más maduro, más acorde con la actualidad internacional, un concepto global. La pobreza y desigualdad en el mundo no es solo un problema de los que la padecen, sino también de los que la generan, o de aquellos que teniendo capacidad para mitigarla no hacemos nada para reducirla. Los cambios deben ser globales, empezando por nosotros mismos en nuestro día a día. La universidad, con su formación en este campo, debe ser motor para generar dicho cambio en la sociedad futura. La cooperación debería ser un tema transversal, que afecte a todos los campos de formación de la universidad, y no solamente a aquellos que por tradición han sido generadores de acciones de cooperación, como la medicina, ciencias políticas, derecho o económicas.”